Celebro la llegada de agosto

Celebro la llegada de agosto, esta ola de calor horrible y mis nuevas seis picaduras de mosquito con una cerveza. O dos, va, que es sábado. En esta tarde tediosa parece que ni la nevera refresque bastante ni el ventilador tenga suficiente fuerza para desembarazarse de todo el calor que se ha instalado  en casa.

 Un bochorno que se sienta a mi lado en el sofá mientras cambio de canal compulsivamente, actualizo todos los perfiles de las redes sociales y trato de no pensar en nada que sea importante.

 Se vive solamente una vez. Hay que aprender a querer y a vivir.  Hay que saber que la vida se aleja y nos deja llorando quimeras. 

Hay papeles esparcidos por la mesa y facturas hace meses apiladas esperando ser guardadas, el polvo cubre todos los muebles con una capa fina que los hace…Que importa! 

Aumento la potencia del ventilador, abro una tercera cerveza y decido que ya basta de todo: una vida no debería ser malgastada de esta manera tan estúpida. Y menos la mía.

Mientras escucho.  Tu Nombre Me Sabe a Yerba.  Serrat